Los gatos son animales curiosos por naturaleza que, en ocasiones, también necesitan purgarse para depurar su sistema digestivo o solventar algún déficit alimentario. Un comportamiento que facilita la expulsión de las bolas de pelo que ingieren cuando se asean con la lengua.
Por eso, es habitual que tiendan a mordisquear las plantas que decoran los hogares de sus dueños, a los que les conviene saber que algunas de ellas pueden ser altamente tóxicas para los felinos.
Porque, las consecuencias pueden ir desde malestares leves hasta intoxicaciones graves. Así que saber identificar las especies peligrosas, tomar medidas preventivas y saber cómo actuar en caso de ingestión, resulta fundamental para la seguridad de sus peludos compañeros.
Estas son algunas de las plantas de interior y exterior más comunes en las terrazas y jardines de los hogares y que pueden ser peligrosas para los gatos:
Cuando un gato ingiere una planta tóxica, los síntomas van variar según la cantidad consumida y la especie de que se trate.
La mayoría son el resultado de irritación o inflamación, como enrojecimiento, hinchazón o picazón de la piel o la boca, pero hay otros ante los que conviene tomar medidas de inmediato.
En general, los signos de alerta incluyen:
Ante la sospecha de intoxicación por ingesta de una planta venenosa para los gatos es importante seguir estos pasos:
Para evitar intoxicaciones, conviene seguir unos sencillos consejos, como mantener fuera del alcance de tu gato cualquier planta potencialmente tóxica. También es conveniente supervisarle cuando se encuentre en el jardín o cerca de especies desconocidas.
Antes de adquirir una nueva planta de interior o exterior, lo ideal es investigar cómo puede afectar a la salud de tu mascota.
La hierba para gatos (catnip) suele tener un efecto relajante en los felinos además de estimularle, aunque hay otros gatos que tras su exposición podrían excitarse mucho. pic.twitter.com/ANxPQKABNN
— Galacho Veterinarios (@GrupoGalacho) June 17, 2024
Algunas de las que no suponen un peligro son la calatea (Calathea roseopicta), el helecho (Pteridium aquilinum), la cinta (Chlorophytum comosum) o la pata de elefante (Beaucarnea recurvata), cuyo tronco, además, le servirá de rascador.
De las aromáticas que se usan para cocinar, algunas como la valeriana, la menta, el tomillo, el romero y el poleo pueden tener un efecto medicinal sobre tu mascota.
Pero, en cualquier caso, para garantizar su seguridad, mejor optar por alternativas saludables, como la hierba gatera (Nepeta cataria) o el pasto de trigo orgánico, que es fácilmente cultivable en una maceta que puedes poner a su disposición.